miércoles, 2 de septiembre de 2015

¿Es necesario tanto sensacionalismo?

Como ya he mencionado en algún que otro post, no hay mayor fuente de sabiduría que el viajar y estar en contacto con otras culturas, y en esta ocasión me ha permitido ser consciente del sensacionalismo con el que los medios de comunicación españoles impregnan cada una de las noticias que vemos diariamente. Me resulta tan contradictorio como absurdo el hecho de no poder decir una palabra malsonante durante el horario infantil, pero en cambio, parece no haber problema cuando a las 15:20 del mediodía, momento en el que millones de familias comparten las conversaciones compañeras de cualquier comida con las "impactantes" noticias que inundan los telediarios, las cámaras hacen un análisis exhaustivo de la extrema delgadez de los niños en África (en caso de ser plato principal de millones de moscas, más que mejor), buscan al yihadista con las manos más ensangrentadas o a la víctima siria que mejor refleje el paso de una guerra encarnizada.

Puesto que una imagen vale más que mil palabras, me gustaría plasmar esta entrada con una noticia que en pocas horas recorrió cada rincón del planeta: el asesinato en directo de dos periodistas estadounidenses por un ex-compañero de la cadena Virginia TV este pasado agosto. Si analizamos la noticia desde uno de los principales periódicos españoles, El País (por poner un ejemplo puesto que la gran mayoría muestran lo mismo) y el telediario de Antena 3, contrastando la noticia con su homóloga británica y estadounidense BBC News, podemos reafirmar la dureza de las imágenes en nuestro país.

Noticia desde los medios de comunicación españoles:
Periódico El País
Telediario Antena 3

Noticia desde los medios de comunicación anglosajones:
BBC News

Con todo ello no pretendo que se esconda una realidad que sabemos de antemano que existe, sino que se eviten imágenes desagradables cuyo fin es ganar cuota de pantalla o aumentar la tirada de los periódicos. ¿Acaso pierde calidad la noticia evitando la dureza de ver un asesinato en directo? ¿Qué telespectador disfruta de un sensacionalismo que lo único que consigue es hacernos inmunes ante la crueldad de dichas imágenes? Aunque parezca mentira, estamos más que habituados a ver asesinatos diariamente, niños muriéndose de hambre y llorando por un trozo de pan, cuerpos desintegrados en explosiones, sangre y más sangre, parece que la cantidad de sufrimiento de las imágenes marca la calidad de éstas, ¿cómo podemos consentir que incluso la televisión pública, aquella que pagamos con el dinero de todos pero que sólo algunos manipulan a su interés, se lucre detallando las desgracias que empañan la vida "feliz, rica y democrática" de los españoles?

Para concluir, solo pido un poco de coherencia en nuestros medios de comunicación, que la palabra "estúpido" no va a traumatizar más a un niño que la imagen de una persona muriendo en directo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario